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Winter is coming y quiero compartirte algunos trucos para que puedas mantener tu casa bien caliente sin calefacción y por lo tanto, sin pagar demasiado en las facturas de los servicios. Por suerte existen varias formas económicas y naturales para lograr este objetivo. ¡Tomá nota!
- Probá sellar los marcos de las ventanas: Podés aplicar masilla, este material se usa para sellar fugas de aire a través de grietas, huecos o juntas.
- Si está soleado, abrí las cortinas: La luz del sol puede darte calor natural en un día de mucho frío.
- Cuando se ponga el sol, cerrá las cortinas: Podés emplear cortinas térmicas para que el calor no se escape de la casa.
- Poné alfombras de felpa en el suelo: Es una buena inversión, ya que las alfombras ayudan a que el calor no se escape a través del suelo.
- Duchate con la puerta abierta: Si dejás la puerta abierta mientras te estás duchando, el vapor se extenderá por el resto de tu casa.
- Tapá el hueco de la chimenea para impedir que se escape el aire caliente por el conducto: Hasta un 20% del aire caliente que hay en la casa puede irse a través de la chimenea.
- Dormí con una bolsa de agua caliente en la parte inferior de la cama: Prepará una compresa de agua caliente y metela por debajo de la manta en la parte inferior de la cama. Tendrás los pies calentitos toda la noche.
- Cuando terminés de hornear algo, dejá abierta la puerta del horno: El aire caliente se extenderá por toda la cocina y la mantendrá caliente.
- Evitá que se meta aire frío por debajo de la puerta y usá un aislante: Rellená el hueco entre la puerta y el suelo.
- Aislá las ventanas con papel de burbujas: Conseguirás conservar hasta la mitad de calor que hay. No es la opción más estética, pero te ayudará a ahorrar.
- Cerrá la puerta de las habitaciones que no estés usando: Cuanto mayor es la casa, más dinero cuesta calentarla. Si tenés una habitación de invitados vacía o un espacio de almacenamiento, cerrá la puerta.
Si no funciona nada de lo anterior… ¡mejor abrigate!