Actualmente, trabajar desde casa es algo bastante común. Sin embargo, aún persisten los conceptos erróneos y los estigmas sobre qué es el trabajo remoto.
¡Es hora de dejar esos estereotipos de lado! Por eso te comparto 10 mitos sobre esta modalidad que cada vez es más popular.
Mito 1: el trabajo remoto disminuye la productividad
Muchos asumen que alguien que trabaja de forma remota se distrae más fácil. ¿La razón? Porque no tiene un jefe que esté vigilando y/o controlando. A pesar de estas suposiciones, Harvard Business Review comprobó lo contrario a través de un estudio. El resultado fue que algunas compañías que experimentaron el trabajo remoto, aumentaron su productividad.
Mito 2: no se puede contactar a los empleados que trabajan de forma remota
Hay que entender que trabajo remoto no es sinónimo de vacaciones o de no trabajar. Los empleados por lo general están vinculados a un equipo de trabajo normal y un horario de oficina.
En una encuesta realizada por TINYpulse sobre la satisfacción y la productividad de los empleados que trabajan de forma remota, un sorprendente 52% reportó contactarse con su gerente por lo menos una vez al día, además de un 34% adicional que reportó tener interacciones menores con los gerentes una vez por semana.
Mito 3: el trabajo remoto implica que los datos no estén seguros
Es cierto que a los empleadores les preocupa el tema de la confidencialidad, y es entendible. Pero la tecnología ha avanzado de tal forma que un equipo de tecnología de la información (TI) es capaz de mantener todas las precauciones y medidas al respecto.
Cuando se le enseña a los empleados aplicaciones basadas en la nube, se le está delegando la seguridad a programas de software verificados. De esta manera los equipos de TI pueden monitorear el control de versiones sin necesidad de tener acceso físico a la máquina del empleado.
Además, las prácticas seguras como las redes privadas virtuales (VPN por sus siglas en inglés), bloquean la información y detienen el acceso a personas no autorizadas.
Mito 4: la comunicación se ve afectada
Trabajo remoto no tiene que significar que la comunicación disminuya. ¿Por qué? Las telecomunicaciones, pueden facilitar que los empleados se concentren y logren una jornada más productiva. Pero, se debe considerar que para que esto sea funcional, la empresa debe delimitar de forma clara los lineamientos y herramientas para la comunicación.
Mito 5: las reuniones no son efectivas
Al igual que otras formas de comunicación, las reuniones de hecho son más efectivas cuando se llevan a cabo por Skype, Zoom u otro tecnología.
Los equipos remotos, representa consciencia acerca de las diferentes zonas horarias y de las cargas de trabajo cuando un proyecto en particular tiene asignado un tiempo específico.
Mito 6: el trabajo remoto desde casa es solitario
Trabajar de forma remota NO es sinónimo de estar encerrado todo el día. Es una decisión personal trabajar en solitario. Existen opciones como cafeterías, librerías y espacios para trabajar en equipo o Coworking.
El aspecto social del trabajo es más deliberado, pero ciertamente no es menos importante en un entorno de trabajo remoto.
Mito 7: el trabajo remoto incrementa los costos
Este es otro mito frecuente que hay que desmentir. Algunas personas y empresas asumen que los problemas de TI aumentan el costo por emplear personas que trabajan de forma remota.
Hay que aclarar que al inicio de una implementación de trabajo remoto algunas empresas tengan que invertir en los equipos. Pero en general, trabajar de forma remota termina siendo más económico.
Mito 8: la cultura empresarial se ve afectada
Uno de los valores que debe considerar siempre una empresa es la manera en la que se trata a los empleados y el valor que se les demuestra. Por lo que algunos ajustes a las estrategias de comunicación pueden ser claves para garantizar buenas condiciones para los empleados sin que la cultura de la empresa se vea afectada.
Mito 9: el trabajo remoto es 24/7
Los empleados que trabajan de forma remota tienen horarios similares a los de sus compañeros de oficina, por lo también se debería esperar lo mismo de ellos en lo que respecta al balance entre trabajo y vida personal.
